¡Conoce cuándo un dolor de cabeza no es inofensivo!
¿Más allá de un simple dolor? Si tus cefaleas se acompañan de algunos de los siguientes síntomas, lo mejor será que consultes inmediatamente con tu médico.
Sabemos que después de un día difícil, con cargas emocionales o estrés en tus actividades diarias puedes llegar a sentir dolor de cabeza y cuello; sin duda alguna los síntomas de la cefalea tensional.
También te puede interesar leer: ¡Pruebas gratis de COVID-19!
Vamos paso a paso, en Famisanar tu salud está primero, por eso, queremos comenzar contándote que la cefalea tensional es un tipo de dolor de cabeza, común a cualquier edad y que se produce cuando los músculos del cuero cabelludo y del cuello se contraen debido al estrés, la depresión, ansiedad o incluso un traumatismo craneal.
Pero ¿Qué hacer ante una cefalea tensional?
Ten en cuenta que si presentas dolor de cabeza leve y continuo, sensación de tensión en las partes laterales o trasera de la cabeza y dolor al tacto en los músculos del cuero cabelludo, el cuello y los hombros, podrás estar sufriendo de un episodio de cefalea tensional, para esto nuestros profesionales del Plan de Beneficios en Salud de Famisanar te invitan a tener en cuenta los siguientes consejos:
¡Aprende a relajarte! Si el dolor de cabeza es producto de un día complicado, comienza a practicar actividades que disfrutes y te hagan cambiar de rutina.
Descansa, ubícate en una habitación tranquila y pon en tu cabeza un paño frio.
Masajea tu cabeza y cuello suavemente ¡Podrás sentir algo de alivio!
Sigue las instrucciones del personal de salud, ten en cuenta que muchas veces los dolores de cabeza pueden darse por el consumo de medicamentos.
Evita automedicarte, si bien existen analgésicos de venta libre, en lo posible consúmelos bajo vigilancia del personal de salud o tu médico de cabecera.
Así mismo, es importante que puedas identificar los desencadenantes del dolor de cabeza y de esta forma aprender a controlarlos; si sufres de dolores de cabeza con frecuencia lo ideal es comenzar a llevar un diario donde anotes la información importante como, por ejemplo, hora y fecha del dolor, alimentos que consumiste, horas de sueño y duración del malestar. Posteriormente revisa con tu médico tus anotaciones y sigue sus recomendaciones.
Recuerda que es mejor prevenir que lamentar ¡Dile si a hábitos de vida saludable! Realiza ejercicio con regularidad, visita a tu médico de cabecera, realízate los exámenes correspondientes y descansa adecuadamente.
¡Tu salud nos mueve